viernes, 12 de diciembre de 2014

La propaganda como arma (Parte II)

¡¡Buenos días bloggeros y bloggeras!!

La entrada de hoy va a estar dedicada la propaganda del bando republicano tal y como os dije en la última entrada.

La exaltación del hombre y de la máquina (como elemento que permite la superación de los límites humanos), así como de la cultura (símbolo final de la victoria social y de la emancipación humana), se presentan como una de las características esenciales y de la diferenciación del hombre republicano, que es llamado a formar parte de un proyecto socio-político común y que utiliza el arte como medio de expresión de sus ideales. El niño, el trabajador, el agricultor, el soldado, la economía y las fuerzas de producción forman parte también del discurso republicano de la época.

Pasamos a mostraros dos ejemplos de esta propaganda del bando republicano.

Se trata de una representación del bando nacional y de sus aliados internacionales, realizado por José Antonio Morales y editado por el Ministerio de Propaganda en 1936. El barco se llama "Junta de Burgos", donde residía el gobierno militar nacional. Se añade además la palabra Lisboa, haciendo alusión a la colaboración que el bando nacional recibía de este país. Entre los personajes que integran la "tripulación" del barco encontramos un oficial de la armada con el emblema del fascismo italiano, un capitalista con un saco lleno de dinero y la swastika nazi en la chaqueta, representando la oligarquía burguesa que apoyaría al bando, así como el apoyo de los fascismos europeos. Además, aparece un cardenal, representando a la Iglesia, uno de los pilares básicos de este bando y el posterior régimen franquista. Se representa también a las tropas africanas, conducidas en un principio por Franco y un cuervo o águila, así como el lema "Arriba España" que formarían parte fundamental del régimen que se estaba tratando de implantar.

Esta segunda imagen está realizada por Pedrero, miembro de la UGT (Unión General de Trabajadores) y presenta a Franco como un esqueleto vestido con un uniforme de estilo cubista con el símbolo de la swastika nazi. Los pequeños personajes que mantienen su capa servilmente son los tres pilares básicos del franquismo: el ejército, la oligarquía financiera y la Iglesia. Esta imagen representa simbólicamente lo que el "generalísimo" y su régimen querían implantar en España desde la perspectiva del bando republicano: el terror y la muerte basado en un régimen militar, oligárquico y católico.

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